Los piojos son unos insectos que se reproducen con mucha rapidez. Todos somos conscientes de que este tipo de plagas infestan las cabezas en muy pocos días, pero pocos tenemos a mano los números. Conocer los datos, que son muy alarmantes, y saber cuánto tardan los piojos en infestar una cabeza, nos indica cómo debemos hacer las revisiones, y qué precauciones podemos -y debemos- tomar.
¿Cuántas liendres ponen los piojos al día?
El ciclo de vida del piojo ya lo hemos visto en nuestro artículo sobre dónde viven los piojos cuando no están en nuestra cabeza, pero no sabemos cada cuánto se repite. Este ratio de rotación (o, lo que es lo mismo, cuántos ciclos de vida inicia un mismo piojo en un periodo de tiempo) nos puede ayudar a saber cuántos piojos puede haber en una cabeza infestada después de un determinado número de días.
En general los piojos se reproducen con mucha rapidez, llegando a su punto de inflexión durante la mitad de la segunda semana desde el inicio de la infestación. A partir de ahí el crecimiento es increíblemente rápido. En una puesta una hembra de piojo suele poner alrededor de ocho liendres o huevos, y las puestas se dan cada dos días aproximadamente.
Si han pasado tres semanas desde que llegó el primer piojo, ¿cuántos puedo tener ahora?
¿Estás seguro de querer saberlo? Bueno, si has llegado hasta aquí nos imaginamos que sí, aunque luego no digas que no te hemos avisado. Como ya hemos visto con el ratio de puesta y la cantidad de huevos que deposita en cada una, un piojo adulto puede llegar a adherir al cabello hasta ciento cincuenta huevos durante los veintiocho días que dura su fase adulta, aunque de media suelen ser unos cien.
¿Todavía quieres seguir leyendo? Seguro que ya te estás imaginando una respuesta, aunque todavía puedes parar y ahorrarte el mal trago. Bueno, tú lo has querido. Si tenemos en cuenta que la persona que se ha infestado lo ha hecho por una hembra que ya tenía huevos en su interior y por algún macho (lo cual es lo más habitual), podemos imaginar que pondrá ocho huevos durante el primer día. Cuando estos nazcan, ocho días más tarde, habrá en la cabeza de la persona afectada unas treinta y dos liendres más.
Después de dieciséis días los piojos más jóvenes, los hijos de la primera puesta, ya pueden tener sus propios hijos. En este momento habrá en total, entre piojos y liendres, más de ciento sesenta individuos. Asusta, ¿verdad? Pues ahora es cuando vienen las curvas, porque dos días más tarde la puesta del día tres de infestación pueden tener sus propias liendres. El crecimiento a partir de este momento es exponencial, ya que cada dos días hay una tanda nueva de adultos que pueden volver a tener piojos. ¿A que parece una película de terror?
En pocas palabras: después de veinticuatro días podemos tener en nuestro cuero cabelludo, repartidas por todo nuestro pelo, más de mil liendres y un centenar de piojos. Debemos de tener en cuenta que las puestas son constantes (alrededor de cada dos días), y cuantos más haya más rápido crecerán. Teniendo en cuenta que los piojos, en su fase adulta, viven alrededor de un mes, en este pequeño ejemplo tenemos que los primeros piojos, los que generaron la infestación en un primer momento, siguen vivos y creando descendencia.
Si los números asustan todavía es peor a partir de la tercera semana, pero normalmente es en estos momentos cuando los padres y madres comienzan a tomar medidas más serias. Además, el cuero cabelludo es limitado (no hay suficiente espacio para todos), por lo que llega un momento que el crecimiento de la pediculosis se ve frenado sencillamente por la imposibilidad de expandirse más. Te dijimos que podías dejar de leer cuando todavía no sabías lo que te hemos contado, pero aquí estás. ¡Y no pongas esa cara de asombro, que te lo habíamos avisado!
¿Cada cuánto tengo que revisar a mi hijo para ver si tiene piojos?
Sabiendo lo anterior podemos prever cuáles son los plazos más adecuados para realizar revisiones a nuestros hijos, y hacerlas correctamente de la manera que ya comentamos en otro artículo. Como hemos visto los piojos, en su primera semana, todavía no han proliferado lo suficiente como para crecer de manera exponencial. En ese momento todavía hay piojos jóvenes que no son capaces de procrear y de poner nuevas liendres.
Por esta razón lo más recomendable, y siempre que se sigan todos los consejos más adecuados para inspeccionar el cabello correctamente, podemos hacerlo cada semana. Una vez el colegio nos avise de que hay un inicio de contagio lo mejor es, si somos precavidos, hacer inspecciones periódicas a nuestros hijos por lo menos cada siete días. Si tenemos miedo de que, debido a que la infestación es especialmente virulenta, nuestro hijo se contagie de más de un adulto podemos reducir este intervalo a tres o cuatro días.
¿Por qué es tan importante hacer inspecciones periódicas?
Como hemos comprobado la infestación comienza a crecer de manera incontrolada después de dos semanas. La erradicación de los piojos y liendres será mucho más sencilla cuantos menos individuos haya en la cabeza del pequeño a tratar, por lo que un seguimiento exhaustivo y profesional puede significar la diferencia entre un tratamiento rápido y fácil o uno largo y tortuoso.